El misterio
Que cosas tiene la vida... lamentablemente, hace un par de días murió la madre de una buena amiga. Este tipo de situaciones no sólo me deprimen sino que además me hacen pensar profundamente, reflexionar, divagar acerca de la vida y pensar en lo que en algunas ocasiones nos parece injusto.
Creo que definitivamente no tenemos conciencia para entender este tipo de cosas y luchar por asimilarlo, sin pensar en un acto de injusticia Divina, parece una tarea muy cuesta arriba. El misterio se manifiesta y aparentemente no queda otra más que aceptar. Vaya un gran abrazo a toda tu familia Melissa.
Después de salir de la funeraria, hice un par de diligencias y me subo a un autobús para ver otra de las cosas que me parecen difíciles de aceptar: uno grupo de niños, entre 10 y 15 años, vistiendo uniformes militares y botas de campaña... ¿Qué diablos está pasando? Una cosa es que los padres quieran infundir un carácter recio y diciplinado a sus hijos, otra cosa es inscribirlos en una escuela militar y convertirlos, a la fuerza seguramente, en pequeños soldaditos.
Que cosa tan absurda. Los padres parecen no percatarse de que el respeto, la responsabilidad y la diciplina vienen de la mano con muchos otros valores (que no se aprenden en un cuartel) y están condicionados por un entorno que tiene que ver más con la familia que con las armas. Que triste ¿no? En lugar de promover una cultura de paz, se impone una educación "pre-militar"... así si vamos a salir de abajo.
Creo que definitivamente no tenemos conciencia para entender este tipo de cosas y luchar por asimilarlo, sin pensar en un acto de injusticia Divina, parece una tarea muy cuesta arriba. El misterio se manifiesta y aparentemente no queda otra más que aceptar. Vaya un gran abrazo a toda tu familia Melissa.
Después de salir de la funeraria, hice un par de diligencias y me subo a un autobús para ver otra de las cosas que me parecen difíciles de aceptar: uno grupo de niños, entre 10 y 15 años, vistiendo uniformes militares y botas de campaña... ¿Qué diablos está pasando? Una cosa es que los padres quieran infundir un carácter recio y diciplinado a sus hijos, otra cosa es inscribirlos en una escuela militar y convertirlos, a la fuerza seguramente, en pequeños soldaditos.
Que cosa tan absurda. Los padres parecen no percatarse de que el respeto, la responsabilidad y la diciplina vienen de la mano con muchos otros valores (que no se aprenden en un cuartel) y están condicionados por un entorno que tiene que ver más con la familia que con las armas. Que triste ¿no? En lugar de promover una cultura de paz, se impone una educación "pre-militar"... así si vamos a salir de abajo.
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